Acrílico sobre tela. 60cms X 60 cms
La novel artista despliega en zonas de color y formas plásticas lineales, geométricamente medidas, una técnica de la imagen extraída de la cotidianidad impresa. Las estructuras armónicas de formatos cuadrados asumen el lugar de pequeñas partes de fragmentos individuales. Minuciosidad en el detalle y en la frontalidad, lúcido pero atrevido colorido, juegos cromáticos vibrantes y, delicado equilibrio de las masas: con tales categorías de una percepción selectiva se acerca Renata a esa silenciosa y espiritual belleza de la imagen fragmentada. Su presencia, proveniente no de composiciones ideales, sino de la experiencia inmediata de los objetos retenidos en fotos y piezas graficas, resulta descrestante.
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